Las Tardes de Mediación que organiza Soluciona Mediación con carácter mensual, son un espacio donde trabajamos como mejorar la convivencia pacífica y el entendimiento entre la ciudadanía, junto a instituciones, Sociedad Civil y Comunidad para poner en práctica soluciones duraderas que reduzcan la violencia, hagan justicia y garanticen en todo momento la participación inclusiva, dentro de un clima de diálogo de reflexión y con una perspectiva transversal de género. Todo ello en consonancia con los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030.
En esta ocasión además se juntaban otros dos acontecimientos muy especiales para nuestra entidad:
- El nombramiento de Soluciona Mediación como Embajada de Paz a y la entrega de la Bandera de la Paz en el marco del proyecto Transdisciplinario Internacional “Construyendo un Mundo Mejor, bajo la bandera de la Paz.
- La Organización del Encuentro Nacional de la Asociación de Justicia Restaurativa
Es por ello que además al coincidir el día anterior 30 de Enero, el Día Escolar de la No Violencia y la Paz, queríamos aprovechar para hablar sobre la “Mediación Penal como instrumento para la pacificación”.
Para ello tuvimos el privilegio de contar con la participación de:
- Ilmo. Sr. D. José María Páez Martínez-Virel. Juez Decano de Málaga
- Ilmo. Sr. D. Román Martín González López. Juez del Juzgado de Instrucción 7
- Dña. Mara Monreal Rodríguez. Presidenta de la Confederación de la Abogacía Joven
- Dña. María José Ortega Gallego. Presidenta de la Asociación ALME.
- Dña. Inmaculada Jiménez Martín Abogada y Mediadora.
A los que en primer lugar nos gustaría agradecer su generosidad y excelente disposición para compartir con todo el grupo su propia visión y experiencia.
Fue así mismo un placer contar entre el público asistente, con la presencia de otras Asociaciones de Málaga de Mediación Penal con las que compartimos trabajo en la Ciudad de la Justicia como son ANFIMA, MEDIAMOS e INTERMEDIA, que a lo largo del debate también fueron aportando sus puntos de vista.
A lo largo de la Tertulia pudimos constatar que en estos momentos la cultura sobre la utilización de la Mediación está muy lejos de lo que nos gustaría, para ello el principal objetivo deben de ser los menores a los que educar en gestionar sus diferencias a través del diálogo, debiendo aprender empatía desde los 3 años, siendo más importante invertir en Planes Educativos para el futuro donde el dialogo esté muy presente que en Justicia y si a los menores les decimos que deben hablar para resolver sus diferencias, ¿debemos hacerlo diferente cuando nos hacemos mayores?.
El estatuto de la víctima nos da la oportunidad de hacer que tenga un papel más importante y se sientan escuchadas, habiendo además campos donde los beneficios pueden ser notables, como pueden ser los conflictos vecinales, sin desdeñar un campo que muchas veces es un gran olvidado, los conflictos existentes dentro del sistema penitenciario.
En una administración de la Justicia falta de recursos, la Mediación es una posibilidad que se presenta que, sin ser la solución a todos los problemas, es una forma de gestión que cada vez será más importante. Destacando entre sus principales ventajas que las personas sientan a la justicia cercana, el paulatino proceso de cambio y la implicación de las partes en la consecución de la paz.
No obstante se echan en falta diversos factores para una mayor implementación como son:
- La falta de formación en conflictología de todos los operadores jurídicos.
- Unos criterios de capacidad de los mediadores homogéneos
- Una implicación real y coordinada (dotando para ellos de los medios económicos suficientes)
- La preocupación dentro del personal de los juzgados a una mayor carga de trabajo.
Esta preocupación en ocasiones puede ser de los titulares del juzgado y en otras ocasiones, del resto del personal asignado, (que a su vez también desempeñan una labor fundamental dentro del proceso).
Por su parte el sistema de menores al contar con su propia legislación específica es un sistema que está funcionando muy bien, siendo los mayores conflictos cuando se encuentran que en un mismo hecho, coexisten menores y mayores (por ejemplo en una pelea) y las víctimas ya habían pasado página en el procedimiento de menores y tienen que volver a pasar por otro proceso diferente , pudiéndose producir casos de revictimización con unos menores que ya habían pasado página sobre esos mismos hechos. Por lo que sería necesario seguir trabajando para analizar qué se podría hacer en esos casos para mejorar un sistema que está produciendo unos magníficos resultados.
Por parte de los Mediadores dentro de la gran labor desarrollada, nos encontramos fundamentalmente 2 hándicaps para una mayor implementación:
- Falta de recursos económicos.
No existen recursos asignados para su realización, por lo que en la actualidad se realiza pro bono, siendo deseable su remuneración como cualquier otro profesional
- Falta de espacio
En la actualidad estas mediaciones se deben realizar exclusivamente en sede judicial, por lo que se debe contar con la generosidad de las sedes judiciales para dotar de espacios para realizarlas y es un factor a tener en cuenta a la hora de hacer las derivaciones, porque ya no depende solo del número de profesionales disponibles, sino del espacio, limitado, de las salas existentes. Debiendo además preveer que una misma Mediación pueda tener lugar en varias sesiones.
Es por tanto necesario que para una mayor implementación de la Mediación Penal, al mismo tiempo que se apuesta desde la infancia por un cambio de cultura, debemos acompañarla de una modificación normativa específica como se ha hecho con la Mediación Civil y Mercantil, una formación homogénea en conflictología en todos los operadores jurídicos, campañas dirigidas al conjunto de personal de los Juzgados y Tribunales y para todo ello además de una voluntad política, hace falta y dotarla de unos recursos económicos suficientes, lo que nos llevaría a una sociedad más pacífica y de mutuo entendimiento
Manuel Angel Gutiérrez Jiménez.
Coordinador de las Tardes de Mediación