En estos momentos en los que la Mediación está en auge como técnica de resolución de conflictos, y coincidiendo con toda la problemática hipotecaria (desahucios, clausulas suelo, crisis bancaria, condiciones abusivas…) parece que desde las más altas esferas políticas se está alumbrando un coctel mágico para sosegar a las masas, rescatándolas de las garras de la crisis.
Las administraciones están ofreciendo a destajo la «mediación» con los bancos, como solución barata (por no decir gratis) que elimina todos los males, cual «aloe vera» que sirve para todo.
En los círculos relacionados con la mediación surgen dudas sobre el asunto, y existen tantas reservas que suplican que no se use tan bella palabra (mediación) para calificar dicho cóctel, proponiendo el sustantivo «inter-mediación».
Y se plantea posteriormente la cuestión de ¿si define un todo engullendo a la «mediación hipotecaria»? o incluso si ¿la «mediación hipotecaria» nunca existió?.
Este ultimo planteamiento nos permitiría puntuar en alza a la intermediación por existir de facto, y estar generando estadísticas positivas que reflejan de que bonita manera las administraciones ayudan a los ciudadanos, a quienes no se protegió en el momento oportuno controlando los excesos de la banca.
Esta será la materia objeto del curso de Verano de EL Escorial organizado por la Universidad Complutense de Madrid y en el cual trataré de poner a la «Mediación Hipotecaria» en el lugar que le corresponde.
Fdo: Gerardo Ruiz-Santacruz Ramos